No todos los libros de desarrollo personal son iguales
No todos los libros de desarrollo personal son iguales, y no todos tienen por qué ser “buenos” o “malos”. Hay libros de desarrollo personal que tienen muchos conceptos útiles y sirven bastante de ayuda, por el contrario, también hay muchos otros libros que se dejan llevar por el esoterismo, no llegando a ofrecer un contenido de calidad y funcional.



¿Cómo diferenciarlos?
Desarrollar una mente lógica y científica es la clave. Además, que gran parte de un libro no te sirva no quiere decir que todo el material del libro sea para desechar, hay veces que hay que analizar y pensar qué es lo que podría funcionar o lo que podría tener más sentido para ti y a raíz de eso desarrollar una lógica al respecto. Por ejemplo, muchos libros de autoayuda (como en el caso de El Secreto), sugieren que tener un “pensamiento positivo” hará que el universo te dé todo lo que quieras, que si lo deseas con todas tus fuerzas acabarás consiguiendo todo lo que te propongas (algo que no tiene nada de sentido, si te quedas quieto sin mover el culo para cambiar tu vida, tu vida no va a cambiar por sí sola).



Aléjate de todo lo místico, injustificado y esotérico. Hay que saber diferenciar lo realista de lo que no lo es, tienes que ser científico y lógico a la hora de analizar las creencias y pensamientos de los demás.  



Abrazar a la lógica
Al aparcar tus creencias, religiones y todo tipo de filosofías obsoletas te darás cuenta de que empezarás a entenderte mejor a ti y al mundo que te rodea.



Para muchos es difícil, pues dejarte llevar por las emociones es mucho más fácil que utilizar la cabeza y el raciocinio. Es por eso que, serás tú el que deba de tomar la decisión de empezar a pensar fríamente.




Atracción VS Acción
Muchos libros de desarrollo personal quieren hacer creer que al modificar tus pensamientos puedes llegar a conseguir todo lo que te propongas. Pero eso no es suficiente.


Pues, el pensamiento positivo no ayudará a que ese conejo se salve de ser comido por ese salvaje tigre hambriento. La acción sí que lo ayudará.